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La instalación de cerramientos de piscina no ha hecho más que crecer. Cada vez más gente valora sus ventajas, y esto se debe, principalmente, a que gracias a una instalación sencilla que apenas requiere de obra, se puede disfrutar de un espacio tan especial como una piscina durante todo el año. O, por lo menos, proteger la piscina para que siempre se mantenga en las mejores condiciones, como nueva.
¿Qué es un cerramiento de piscina?
Un cerramiento de piscina es una estructura, normalmente de aluminio y PVC o cristal, que protege y aísla la piscina del exterior. De esta manera, el espacio de la piscina queda protegido del exterior y se puede utilizar durante todo el año, no solo en la temporada estival. Por otra parte, al aislar y proteger la piscina, también se evita que se llene de suciedad, que se deteriore con el tiempo o que las inclemencias del tiempo la afectes.
Tipos de cerramientos de piscina
Dependiendo de las necesidades, hay varios tipos de cerramiento de piscina. Los dos grandes tipos que hay son los de cubierta baja y los de cubierta fija.
Los de cubierta baja son móviles o retráctiles, y sirven para cubrir la piscina durante los meses en los que no se usa para así mantenerla limpia y protegida. Estas cubiertas se pueden desplegar y plegar de forma manual o motorizada, y hay de muchos tipos, dependiendo del mecanismo, los materiales, o de si la cubierta del cerramiento es plana y transitable o no.
Por otra parte, los de cubierta fija son cerramientos elevados que aportan una instancia más a la vivienda. Normalmente, son aislantes, y aclimatan la estancia de la piscina para que se pueda usar durante todo el año. Tiene puertas de acceso y normalmente están construidos en aluminio y PVC o cristal, o también pueden estar adosados a una pared exterior de la vivienda.
Materiales para cerramiento de piscina
Como hemos dicho, normalmente se emplea el aluminio para la estructura del cerramiento, y el PVC o el cristal, generalmente templado, para los paneles. Aunque también los hay que tienen estructura de madera y sin paneles, para que corra el aire del exterior, o de obra, haciendo de la piscina una estancia cerrada más de la casa.
Ventajas de un cerramiento de piscina
Los cerramientos de piscina, sean del tipo que sean, proporcionan muchas ventajas, entre las que se puede destacar las siguientes:
- Limpieza y mejor mantenimiento: Al estar cubierta y protegida, la piscina queda al resguardo de la suciedad, del polvo y de las inclemencias metereológicas. La lluvia, por ejemplo, hace que aparezca moho en los bordes de la piscina, con un cerramiento esto se evita.
- Seguridad y privacidad: Un cerramiento, principalmente si es de tipo fijo, proporciona seguridad y privacidad, ya que dependiendo del material de los paneles, de si son translúcidos u opacos, proporciona a la estancia de la piscina privacidad para los que están disfrutando de ella.
- Son resistentes y duraderos: Este tipo de estructuras son muy duraderas, y lo normal es que se tengan de por vida. A un precio bastante reducido, se obtiene una estancia nueva para el hogar, y una protección para la piscina que la mantendrá nueva como el primer día.
Mantiene alejados de la piscina a animales e insectos: Gracias al cerramiento, ratones, mosquitos, avispas, o cualquier otro tipo de animal o insecto que pueda caer a la piscina y ensuciarla, quedará fuera.
